En el mundo jurídico existen muchos arreglos que se pueden hacer en determinadas negociaciones. En el caso de Murcia, encontramos numerosas leyes que protegen los bienes materiales de los civiles, además, existen algunas que benefician a las personas y/o entidades que prestan dinero. En particular y en esta oportunidad, haremos referencia a las cesiones de créditos.
¿Qué es una cesión de créditos en Murcia?
Cuando una persona adquiere un crédito de un banco o cualquier entidad, se le denomina deudor y la parte que prestó el dinero bajo ciertas condiciones, es llamado acreedor. Cuando esto ocurre, la posición del acreedor puede cambiar y es posible que ceda el crédito a otra persona ajeno a él.
Para dejarlo más claro con un ejemplo, veamos el caso de los créditos bancarios. En tal caso, el banco sería la persona principal que otorga créditos a civiles u empresas. Ahora bien, el banco puede “ceder” su posición de acreedor a otra entidad, por ejemplo, a otro banco. En este caso, el deudor puede estar o no notificado de la cesión y no puede oponerse dicha decisión.
Las personas que se encuentran deudoras no tienen voz en este tipo de negociaciones; sin embargo, si un deudor logra pagar el dinero que debe al acreedor antes de realizar dicha cesión, él quedará exonerado de su deuda. Así que no tendrá que tratar con la otra entidad que tiene la nueva posición de acreedor; aunque si se habla de un crédito hipotecario, la cesión de créditos tiene que formalizarse a través de una escritura pública.
Visto lo anterior, tenemos que existen tres partes diferenciadas en la cesión de crédito, a saber:
– Cedente: viene a ser el acreedor original sobre el que se configuró el crédito.
– Cesionario: pasa a ser el nuevo acreedor, delante del cual queda obligado el deudor original.
– Cedido: es el deudor original del crédito.
¿Cuál es el objetivo de la cesión de créditos?
Este negocio jurídico es mayormente utilizado cuando una empresa o entidad bancaria necesita recuperar dinero de forma rápida y no puede esperar hasta que el deudor sea capaz de pagar el financiamiento. Es por ello, que se utiliza de forma frecuente en el campo crediticio.
Una transmisión de crédito puede ser realizado por un negocio como una compraventa, donación, legado, créditos con finalidad solutoria, permutas, entre otros compromisos donde exista la obligación de un pago determinado. Por una parte, los acreedores ven como una solución realizar la cesión, ya sea por un préstamo de largo plazo u otra razón y los inversionistas también pueden sacarle provecho a ello, solicitando préstamos de gran cantidad que dure años en pagarse causando que el banco acorte las cuotas con menor tasa de interés posible.
¿Dónde se regula la cesión de derechos?
Se puede encontrar en el código civil regulaciones a este tipo de negociaciones como “transmisión de créditos y otros derechos incorporales”; sin embargo, en esta ley no hay ninguna mención explícita del negocio jurídico denominado cesión. Dichas regulaciones pueden analizarse en el artículo 1112, 1218, 1227 y 1526 de dicho código, en los cuales onde se exponen las limitantes de realizar esta transacción.
Por ejemplo, si la razón de la cesión se está realizando por un inmueble, este inmueble debe estar inscrito en el Registro para que se apruebe su validez.
Las regulaciones de estos negocios están supuestos también a las denominadas cesiones especiales, donde existen casos más complejos que pueden abarcar otras áreas del código civil. Igualmente, algunas regulaciones pueden involucrar al deudor dependiendo de cómo se haga las transacciones, o si es una práctica litigiosa o no.
Cesión de derechos hereditarios
Este acto jurídico se compone de la transmisión de los derechos sobre una herencia entre cedente y un cesionario. Es decir, la posición de heredero cambia cuando se ceden los derechos a la persona cesionaria, quien ahora representará la figura activa de la herencia y podrá solicitarla cuando esté disponible.
Para estos casos los artículos 1533 y 1534 del Código Civil tienen un régimen donde el cedente y cesionario tienen obligaciones en casos de que haya deudas que pagar.
Cesión de la totalidad de ciertos derechos, rentas o productos
Acerca de esta figura de cesión de derecho, se pueden encontrar varias regulaciones en los artículos 1532 y 525 del Código Civil, donde se explica la prohibición de la cesión de derechos del uso y habitación. Aunque, estas son regulaciones aisladas y no explícitas, sin embargo, si se quiere realizar esta modalidad de cesión, se tienen que tomar en cuenta tales prohibiciones.
Cesión global de activo y pasivo
Este tipo de cesión de créditos está enfocada principalmente a las empresas. En tal caso, Las sociedades mercantiles pueden pasar un bloque de su patrimonio a otras partes por sucesión universal. En otras palabras, la empresa puede transmitir a socios o terceros una parte del patrimonio a cambio de una contraprestación.
Modalidades de la cesión de crédito en Murcia
De acuerdo a la modalidad escogida, la cesión puede ser:
Notificada
Cuando el cedente y cesionario notifican al deudor acerca del cambio de acreedor con respecto a la obligación.
Sin notificación
Cuando ninguna de las partes (cedente y cesionario) notifican al obligado o deudor del cambio de titularidad.
Sin recurso
Es el supuesto donde el cedente rechaza o se excusa de cualquier responsabilidad frente al cesionario en caso de que el deudor no pueda o no quiera responder por la deuda.
Con recurso
En este supuesto el cedente sí queda obligado a responder frente al cesionario en caso de que el deudor se declare incapaz de cumplir su deuda.
Cesión de créditos litigiosos y no litigiosos
En nuestro Código Civil todos los derechos adquiridos mediante una transmisión de créditos son de carácter legal, siempre y cuando no haya un previo incumplimiento expuesto en un documento específico, como una demanda. Desde esta óptica ya encontramos una primera diferenciación de créditos litigiosos o que no sean litigiosos.
Un crédito litigioso se caracteriza por tener un reclamo judicial por parte del acreedor y una respuesta por parte del deudor, por lo que habría un procedimiento legal entre ambas partes. Mientras que los créditos no litigiosos, se basan en que la figura del deudor no puede tener ninguna oposición contra cualquier imposición legal por parte del acreedor.
¿Qué es el retracto de crédito litigioso?
Las leyes españolas nombran el derecho de retracto como una facultad que tiene cualquier vendedor de recuperar la propiedad que se vendió mediante el cumplimiento que el Código Civil impone. Por esta razón, existen regulaciones que se puede encontrar en el artículo 1507 de dicha norma, que indica que los vendedores a través de un retracto convencional, pueden recuperar la cosa vendida mediante lo pactado.
Ahora bien, existen varios tipos de retracto como lo son el enfitéutico, colindante, el arrendatario, entre otros. Pero, uno de los más discutidos es el retracto a los créditos litigiosos; este se basa en que el deudor puede ejercer su derecho explicado en el artículo 1535 del Código Civil, donde puede abonar el precio inicial de la cesión que adquirió el cesionario, exonerando al deudor del monto inicial.
Así, por ejemplo, si un deudor debe 1.500 euros a un acreedor, pero este último lo traspasa a un cesionario por un valor de 300 euros, el deudor puede pagar ese valor al cesionario, liberándose de la deuda inicial. Para que esto sea posible, se cuenta con un plazo de nueve (9) días, donde el deudor tendrá que pagar el precio correspondiente.
Aunque esto solo ocurre con los créditos litigiosos; en el caso de los créditos que no poseen litigio, el deudor no puede oponerse a ninguna cesión. En conclusión, hay que tener presente las características del crédito y la manera en que se hizo, para poder realizar un retracto de crédito litigioso.
Características para ejercer el derecho de retracto
Para saber si una persona está en el marco de la ley, para exigir el derecho de retracto del crédito litigioso, debe tener en cuenta lo siguiente:
❶ El deudor tiene que aceptar la reclamación proveniente del acreedor, entonces, desde el momento de la demanda judicial y la aceptación, se puede indicar que se trata de un crédito litigioso.
❷ Desde la contesta de la demanda se obtiene un crédito por litigio.
❸ Para poder extinguir el crédito inicial, el deudor debe pagar los costes e intereses correspondientes, desde el día que se adquirió.
❹ Si se pasan los nueve (9) días para poder realizar el retracto, el deudor tendrá que pagar la cantidad inicial establecida.
¿Qué es una cesión en bloque de créditos? El caso de los fondos buitres
Hay que destacar este apartado, ya que, en la actualidad, la mayoría de entidades bancarias transfieren sus créditos, mayormente hipotecarios, a fondos grandes de inversión (algunos llamados fondos buitres). Esto pasa, porque los fondos adquieren los créditos a un precio inferior de su valor real, entonces ellos tendrían mayor ganancia que la propia entidad bancaria.
Por este motivo, tanto el cedente como el cesionario, intervienen en el derecho de retracto con el fin de que el deudor no pueda acceder a su derecho expuesto en el artículo 1535 del Código Civil. Así, estas entidades suelen realizar las cesiones de derechos “en bloque”, es decir, que no se realiza la documentación necesaria de forma individual, sino que se hace en grandes cantidades sin especificación alguna.
Otra dificultad bastante común de encontrar, es que el deudor suele realizar una reclamación por escrito, pero al cedente le basta con no contestarla para así invalidar la posibilidad de que se pueda ejecutar el derecho a retracto.
¿Por qué en la cesión de bloque de créditos no se puede utilizar el derecho a retracto?
El supuesto de realizar una cesión de créditos litigioso en este tipo de casos (bloques de créditos), es inexistente, ya que las cesiones en bloque se toman como una venta alzada de una totalidad de créditos.
Por otro lado, al no tener una información individualizada y que el precio de la adquisición del crédito sea indeterminado, es tomado como una cesión global de créditos, donde se elimina toda posibilidad de retracto por parte de los deudores. Esto, porque se desconoce si el crédito cedido es el de la persona de forma individual.
Proceso de la cesión global de activo y pasivo
En el caso de que la entidad bancaria o empresarial quiera realizar una cesión global, tendrán que aprobar dicho procedimiento a través de la Junta General, prácticamente como si se estuviera realizando una fusión de empresas. Es decir, los administradores deben realizar un informe, donde se justifique el proyecto a realizar y los interesados (miembros de la junta) puedan apoyar u oponerse a dicha acción.
¿Cómo ejercer la acción de retracto en Murcia?
Para que se pueda ejercer el derecho de retracto, el deudor debe presentar ante un juzgado una demanda de juicio ordinario, dirigida al cesionario. En este caso, también es necesario demandar al cedente, para que se abra el proceso de forma correcta.
Al realizar esta práctica, ya se tomará esto como un caso de derecho de retracto.
Parte judicial del derecho de retracto
Este procedimiento se realiza de forma pacífica, es decir, no hay contención entre las partes. Por ello, el juez se limita a evaluar si se realizaron las demandas correspondientes para iniciar todo el proceso. Para que se pueda tomar la declaración realizada por el deudor de forma positiva, el documento de cesión debe estar individualizado, indicando el trato que se tenía con el cedente y qué se le está reclamando al cesionario.
Ahora bien, cuando el documento no está individualizado, el juez a cargo desestima la demanda inicial y no podrá realizarse el derecho a retracto.
Jurisprudencia de la Unión Europea contra las cláusulas abusivas
En el caso de que en los préstamos haya posibilidad de extinción de la deuda, se podrá aplicar la Directiva 93/13/CEE del Consejo de la Unión, que habla sobre las cláusulas abusivas en los contratos celebrados con consumidores. Lo que afecta a este decreto, es que muchas veces los préstamos no son casos individualizados, por lo que la Ley se acoge al código civil, en vez de a dicha directiva.
Ahora bien, en el caso de que un consumidor haya firmado un contrato donde no se haya negociado previamente e individualmente las condiciones, esto será tomado como abusivo. Ello, porque existe un desequilibrio entre los derechos y obligaciones del vendedor y consumidor.
Al respecto, expresamente la mencionada Directiva señala que:
«[N]o es aplicable a una práctica empresarial de cesión o compra de créditos frente a un consumidor, sin que la posibilidad de tal cesión esté prevista en el contrato de préstamo celebrado con el consumidor, sin que este último haya tenido conocimiento previo de la cesión ni haya dado su consentimiento y sin que se le haya ofrecido la posibilidad de extinguir la deuda con el pago del precio, intereses, gastos y costes del proceso al cesionario».
¿Qué es la pluralidad de acreedores?
Se denomina obligación de sujeto múltiple o plural, cuando existen varios acreedores o diferentes deudores asociados a una prestación (de hacer, no hacer o dar) única. Dicha pluralidad se puede referir a una obligación conjunta, es decir, una prestación que se pueda fraccionar o no, por esto, las obligaciones conjuntas pueden clasificarse en divisibles e indivisibles.
Teniendo en cuenta todo esto, las obligaciones conjuntas pueden ser mancomunadas o solidarias. El primer término, se refiere a la división del crédito o de la deuda entre varios acreedores; creando así el derecho entre deudor y acreedor a una parte de la prestación total. Al contrario, en las obligaciones solidarias tienen relación cada uno de los deudores para responder por la totalidad de la obligación que los une, sin división alguna.
Entonces, tenemos que en el carácter mancomunado, un acreedor puede dividir su obligación para poder traspasarla a un Cesionario si así lo determina. Mientras que en una obligación solidaria, los acreedores no pueden ceder su parte a voluntad, puesto que, si esto sucede, otro acreedor puede solicitar una nulidad contra la cesión, si considera que este acto es perjudicial, esto está representado en el artículo 1141 del Código Civil.
Cabe destacar que para la obligación de carácter solidaria sea válida, debe existir una pluralidad de deudores. Además, tiene que haber una ley o contrato, para que los acreedores puedan exigir el cumplimiento de dicha obligación.
Marco legal de la pluralidad de acreedores
Se puede encontrar en el Código Civil y la jurisprudencia distintas menciones acerca de los casos de responsabilidad solidaria, aunque se debe tener en cuenta en dichos casos, la autonomía de la legislación y las corporaciones locales.
Algunas de las leyes que avalan a las obligaciones mancomunadas y solidarias aparte de las ya nombradas, son la ley tributaria, la ley de contratos de seguro, estatuto de los trabajadores, leyes de propiedad intelectual y horizontal, entre otras. Cada una de ellas hace mención en algún artículo, acerca de las obligaciones que puede enfrentar un individuo, relacionado a la cesión de créditos.
¿Qué es una cesión ilegal en Murcia?
El Código Civil español tiene a su vez diferentes artículos que determinan cuando la cesión es ilegal y esta carece de veracidad, por lo que termina siendo anulada. Tal es el caso de los contratos que se oponen a la moral o a las leyes correspondientes, esto se puede determinar en el artículo 1275 del Código Civil.
Un segundo aspecto de los contratos que se pueden considerar nulos, son los que se determinan como ilícitos. En este caso, ninguna parte pueden solicitar recuperar lo que se ha entregado, ya sean bienes o dinero, esto se describe en el artículo 1306 del Código Civil. Por último, está el caso en que el cedente y cesionario acuerdan un daño directo al tercero (deudor en este caso) por lo que la cesión del crédito litigioso queda desestimada.
Las consecuencias directas para estos casos donde la cesión sea ilegal y se declare nulidad son:
❶ No existe recuperación del dinero por parte del cedente.
❷ El deudor puede realizar una acción para recuperar el dinero pagado.
❸El cesionario no puede recuperar del cedente la cantidad de dinero que pagó para poder realizar la cesión del crédito.
¿Cómo funcionan las titulizaciones y cuál es su relación con la cesión de créditos?
La cesión y titulización de créditos son dos cosas distintas; cuando se habla de una titulización de activos, se refiere a un proceso donde los flujos financieros que se realizan en una operación crediticia, son destinados a las emisiones de valores negociables, un ejemplo son los préstamos.
Esto, causa que las empresas financieras u otras entidades, puedan externalizar sus activos, realizando un “piso en el futuro” donde puedan obtener una financiación. Así, los fondos de titulización, pueden cambiar estos activos a bonos de titulización, para que puedan ser activos financieros negociables y puedan usarse en otro tipo de tratos.
Cuando se habla de la parte crediticia, un cedente es el que traspasa los derechos de crédito a la entidad denominada fondo de titulización, que posee una renta fija por los derechos de crédito que han adquirido a través del tiempo, obteniendo liquidez y financiamiento para pagar a los cedentes. En este caso, los deudores pueden ejercer el derecho a retracto, pero con algunas diferencias.
Si el deudor quiere iniciar una demanda para que se pueda realizar el derecho a retracto, tendrá que dirigirla a la entidad prestamista, ya que, la titularidad del crédito no cambia. Entonces, lo que ocurre es el cubrimiento de los activos por parte de la entidad bancaria o prestamista por medio del mecanismo que ofrece la titulización, creando así, una situación donde dicha entidad tiene una legitimación activa y pasiva a la vez.